Jueguitos anales
Uffff... ¡Cuántas polémicas ha desatado este video en las redes y en los foros especializados en porno gay! Discusiones eternas en las que nunca solemos ponernos todos de acuerdo, juas.
No, ninguna de las polémicas a las que nos referimos están vinculadas a la diferencia de tamaños, juas. Es cierto que, en el caso de nuestros protagonistas de hoy, esa diferencia es más que notoria, pero las discusiones van por otro lado.
Por una parte, hay mucha controversia respecto a la necesidad o no de usar juguetes eróticos para calentar la atmósfera. Sobre todo en parejas estables que llevan años juntos. Nos hemos hartado de leer larguísimos debates sobre el asunto y, para nuestro criterio, la cuestión no admite controversia:
¡Necesario, las pelotas!
Que cada uno haga lo que se le cante.
Que cada uno haga lo que se le cante.
La otra polémica desatada es un poco más difícil de resolver: ¿Pueden dos actores porno llevar adelante una pareja estable a través de los años?
Porque, así como los ven, estos dos chicos que hoy invitamos a BANANAS (Jake Preston y Clark Reid) son pareja en la vida real.
A Jake ya lo hemos invitado varias veces. Ha aparecido, sobre todo, en los cuatro episodios de la serie Chicos de viaje que hemos compartido hace poco. Y tenemos planeado seguir invitándolo porque, sencillamente, nos encanta, jajajaja. ¡Y no solo a nosotros! Hoy por hoy, es uno de los actores porno más populares del sello MEN.com.
En cambio, Clark es la primera vez que aparece en nuestro blog. Como es fácil de adivinar, se trata de un fisicoculturista que finalmente ha liberado a la loca que llevaba dentro y se ha dedicado al porno, jajajaja.
Clark apareció por primera vez en las pantallas a fines de mayo de 2022, en un solo para el sello Sean Cody. Fue suceso y la productora publicó por lo menos una escena suya por mes durante todo ese año. Hasta que el muchachote recibió oferta de MEN.com y allí fue con toda su gigantesca humanidad. Allí conoció a Jake y (dicen que sin darse cuenta) surgió entre ellos un sentimiento que iba más allá de la mera calentura, je.
Entre tanto, Clark ya matizaba sus actividades, como culturista y como actor porno, con una importante participación en la red de Tik-tok, cuya relevancia fue en aumento desde que incluyera de tanto en tanto a su pequeño novio, juas. Hoy en día ya acumula más de medio millón de seguidores.
Y la polémica surgió desde el momento en que ambos tórtolos hicieron pública su relación, con centenares de buenos deseos por parte de sus seguidores, pero también millares de advertencias y vaticinios funestos acerca de experiencias similares anteriores.
Lo cierto es que no conocemos parejas de actores porno que hayan perdurado en el tiempo (aunque tampoco nos consta que haya mayoría entre las parejas comunes que lleguen juntos a la vejez). Casos hubo y hay a montones. Todas de corta duración.
Una de las más notorias que se nos vienen a la mente es la formada por Allen King y Ángel Cruz, a quienes hemos homenajeado en Amor porno (publicación que ahora vemos que debemos recargar, je). También fue muy mediática las unión de Ángel Rivera con Ben Masters, que casi termina de manera trágica con el intento de suicidio por parte de este último, luego de que Ángel lo abandonara para ponerse de novio con Joey Mills. De más está decir que esta segunda pareja de Ángel duró solo un par de años. Otra pareja notoria fue la de nuestro amadísimo Blake Mitchell (a quien Peace bautizó como "Gafitas") que en 2018 blanqueó su relación con Chad Alec, que luego se hizo conocido como Leo Grand.
Este último caso fue curioso porque la relación se había iniciado un par de años antes de que la hicieran pública y todo parecía ir viento en popa. Hasta ese momento, Leo Grand era un anónimo que no pertenecía al mundo del XXX. Pero obviamente, luego de que el mundo lo conoció como el novio oficial del actor porno estrella del momento, comenzaron a lloverle las ofertas y él mismo terminó ingresando a la industria, aunque con un suceso muy inferior al de su notorio compañero.
Desde nuestra humildísima mirada, acá el gran problema son los celos.
Pero no los celos de pareja sino los celos profesionales. Al dedicarse ambos a la misma actividad, surgen necesariamente rivalidades, en función de la disparidad del suceso de uno y otro. Lo mismo podría sucederles (suponemos) a una pareja de abogados o a una de docentes, pero en el mundo del porno (donde los egos se magnifican y la imagen lo es todo) esas mismas rivalidades pueden llegar a ser ingobernables.
Dejamos el debate abierto por si alguien más quiere hacer su aporte, je.
Mientras tanto, disfrutemos del video. Que para algo estamos acá.
VER EN
Me encanta Jake pero nunca imagine que tuviera un novio TAN grandote jajajajaja
ResponderBorrarMe cansan las polémicas inútiles. Cómo bien decís que cada uno haga lo que le salga de los huevos... ;)
ResponderBorrarEn lo professional, imagino que habrá profesiones donde esas envidias y celos sean muy freqüentes. En la mía, que es una professión técnica, también las hay, sin duda, pero no es lo mayoritario, ni siquiera frecuente. Solemos trabajar en equipos donde el exito se basa en la solidaridad y el saber compartir, y ahí no caben ni celos ni envidias si quieres triunfar.
Besos y abrazos
Si unolo piensa, en el porno debería ser igual. En general, suele ser un trabajo en equipo, jeje. Pero los egos parece que juegan un papel más preponderante.
BorrarQueda mucho por mejorar en la educación de la personas, sin duda.
Borrar¡Qué guapetónes!
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