Sudor y arena... o Veinte años no es nada
A veces planeamos una publicación y, cuando empezamos a trabajar, nos sale otra, juas.
Confesamos que la idea original de hoy era hacer una publicación centrada en nuestro amado colombiano Ángel Cruz (que con nosotros funciona del mismo modo que la miel para las moscas, jeje). Sin embargo, puestos a buscar en los archivos, se nos apareció este video en el que nuestro muchachito comparte el protagonismo con un madurito más que apetecible de nombre Matt Anders al que (somos sinceros) no conocíamos.
Sony fue el primero en destacar su presencia y, con la compulsión obsesiva que nos caracteriza, sus maridos nos embarcamos en la tarea de buscar data que nos esclareciera el panorama.
A Ángel ya lo conocemos y no por ello dejamos de calentarnos cada vez que lo vemos. Pero por si hubiera alguien que todavía no lo registra, les recomendamos ver la que para nosotros es su obra cumbre (junto con el que por entonces era su pareja en la vida real, Allen King): Amor porno.
Como ya dijimos, en esta ocasión pensábamos centrarnos una vez más en él. Pero la aparición de Matt nos hizo cambiar de planes.
Y es que Matt nació en Varsovia (Polonia) en 1973 ¡y todavía sigue haciendo porno de manera profesional!
Es polaco, sí, pero cuando tenia 15 años su familia y él pudieron trasladarse a Canadá, huyendo de los rigores del régimen totalitario que caería, no obstante, pocos años después, dando lugar al primer gobierno no comunista del bloque de la Europa del este.
Según pudimos averiguar, Matt debutó en el porno en 1995, a la edad de 22 años y se veía así, jeje:
Claro que a finales del milenio las cosas todavía no eran lo que hoy. Tal vez muchos de los bananeros de hoy no lo sepan (aunque imaginamos que muchos sí), pero en los noventas el porno se veía en la intimidad de las casas, en un VHS alquilado, o en unos tugurios que oficiaban de Cine XXX, a cuya salida (según nos han contado) los gays de aquellos años temían por sus vidas, ante la posibilidad no tan improbable de ser detectados por algún agente de moralidad o por alguna banda de rufianes homofóbicos, que muchas veces eran todo en uno.
Aquel tramo de la carrera porno de Matt fue relativamente corto, ya que a fines de 1997 volvió a emigrar (esta vez hacia Londres) para iniciar estudios universitarios. Sin embargo, antes del viaje, participó del que sería su gran suceso en aquella primera etapa: "High Tide" (Marea Alta) de Falcon Studios, donde nuestra maravilla rubia era drogado, secuestrado y violado por numerosos chongos musculosos, en diversas escenas, hasta ser liberado y garchado por su salvador en la escena final. Una clara treta para romantizar y naturalizar el abuso homofóbico que aun hoy sigue dando resultados, je.
De allí en más, el bello polaquito desapareció de las pantallas.
Pero hete aquí que, casi ¡veinte años después! (se ve que el viejo tango de Gardel algo de razón tenía, jajaja) un maduro Matt Anders, más tonificado, barbado y cachondo que antes, regresó al ruedo. No debe haber muchos casos como el suyo.
En 2016, afincado ahora en Barcelona, Matt hizo su segundo debut en el porno con el sello Men At Play.
De allí en más (y hasta la actualidad), el bello polaco sigue dando que hablar en las pantallas. Acá pueden ver una muestra de lo que fue y lo que es, jejejeje.
La escena que compartimos hoy no es de las últimas, sino una de las primeras de esta segunda etapa de su carrera. Pero estamos más que seguros de que será del agrado de todos los que se dan una vuelta por aquí de tanto en tanto, juas.
Dejen sus comentarios y apreciaciones 🥰
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Ojala la vida me cruce en el camino de un papito como este!!!!!!
ResponderBorrarchicos muy buenos y sexo. Sin embargo, creo que las voces fueron dobladas. Con ese viento, la captación directa del sonido habría sido imposible.
ResponderBorrarComparto eso de que Àngel es tan atractivo como la miel para las moscas... Y que compartan los papeles me parece delicioso...
ResponderBorrarBesos y abrazos